Había llegado de la casa de arriba
y me esperaban con la sorpresa de que había un pedazo de carne que me habían mandado para mí.
No entendía muy bien el recado que el pequeño me estaba dando pues él no hablaba español ni yo su idioma.
Me quedó mirando y solo me señaló que fuera a la cocina.
Allá voy, mientras el aroma del café que estaban tostando en el fogón invadía el ambiente y hacía que uno inspirara aún con más profundidad, impregnándose del deleite y de la aroma terapia que ello significaba.
Me la muestran.
– Carne tuya
-¿De dónde salió?
– Es pago
-¿De quién?
-De Filiberto
-¿Y quién es Filiberto?
-Vive en carretera
-¡Aaaah!
-Dice es pedazo toca
-¿Me toca de qué?- mientras hago un movimiento con las manos, como de no estar entendiendo de que se trataba.
-Carne venado
Ya a esa altura más confundida estaba, me era extraño lo que estaba sucediendo y cuando hablaron de carne de venado, menos, pues qué tenía que ver yo con eso, era difícil el saber de qué se trataba, pues con el escollo del idioma, muchas cosas eran como una adivinanza o a ver que se podía deducir, pero en este caso ni una ni la otra servían.
En eso entra uno de los chamacos que sabían hablar más el español, me dice que es en pago a la ayuda que el Chimi había dado para cazar un venado la noche anterior.
Quién se iba a imaginar que la carne la había conseguido el perro, que se había puesto las pilas en la noche y había salido con el grupo que buscaba venado. En mi vida me hubiera imaginado una trama así, y menos aún que los perros si colaboraban recibían su porción, cosa que se me hizo bien, pues hay que recompensar el esfuerzo de ellos.
Resulta que era un muy buen cazador, sabía seguir el rastro del animal, tanto que lo pedían prestado para la próxima vuelta, que me daban mi parte si podían cazar, pues en esa, él se había aparecido sin que nadie lo llamara, dicen que venía caminando por el sendero, al verlos los empezó a seguir y lo dejaron pues vieron que era acomedido, en seguida se hizo líder de los otros perros, que iban atrás de él.
Y sí, los llevó hasta donde estaba el venado y ayudó a cerrarle el paso junto con los otros y ahí pudieron cazarlo.
Ni modo que se le iba a hacer había salido con algo que en lo personal no me gustaba, el que estuvieran matando animalitos.
Así se volvió famoso, no sólo estaba bien alimentado, era inteligente, sociable sino además era cazador.
-¿Qué dice mi mamá que hace con carne?
-Que la cocine si quiere
Al rato me llaman para que vaya a comer, le digo que está bueno que ellos se la coman, pero insisten, tengo que probarla, ahí en la mesa está el plato humeante con un caldo que desprendía un delicioso aroma.
Me senté y dividí el pedazo de carne que me habían servido, una parte para el Chimi, más allá que me habían dicho que a él le pertenecían todos los huesos, también era justo que se comiera un poco de la pulpa y el resto para aumentar la porción que le correspondía a los niños, los cuales abrieron los ojos de la sorpresa pues no se podían imaginar que alguien despreciara ese pedazo tan sabroso que le había tocado, ya que era uno de los mejores.
Por supuesto que comí un bocado de ella, para no hacerles el feo, tomé el caldo para que todos se pusieran contentos.
Todos estaban felices, más la cocinera ya que cuando llegara su “mamalal”, esposo, le podía dar la sorpresa de que le había cocinado carne, cuando él ni se lo imaginaba, ya que en la mañana temprano cuando salió a la milpa no había nada, solo lo esperaba su frijolito con tortilla.
Imaginaba su cara, cuando después de llegar, sacarse sus botas, bañarse, cambiarse de ropa, se sentara a la mesa esperando que le sirvieran su clásico plato y se le apareciera un buen pedazo de carne que ella le había seleccionado especialmente para él, con un buen sazonado, con unas deliciosas tortillas recién sacadas del comal.
Eso era muy importante para las mujeres tener una buena comida cuando se podía para halagar a su hombre y más disfrutaría aún cuando le contara que había sido el perro el que la había llevado a la mesa.
Desde ese momento el Chimichurri comenzó a tener otra consideración, se le empezó a tener más en cuenta.
Todos se sentaron frente al plato que sacaba ese humito que despertaba el hambre aunque no se tuviera, ahora podían disfrutar de la comida, agradeciendo al animalito y dándole su parte, aunque fueran los huesos, como correspondía.
México
HISTORIA DE ANIMALITOS: LO INESPERADO
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GRACIAS A TODOS!!!! SALUDOS!!!!
El perro es parte de la familia, especialmente en pequeñas comunidades donde su utilidad es máxima, no un adorno. Un gran abrazo
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Sí Arpon, así es, no son mascotas, como bien dices son parte de la familia, un abrazo
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Reblogueó esto en Espacio de Arpon Files.
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Gracias, te mando un abrazo grande
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Es muy interesante que aún se valore la colaboración que los perros han tenido en la supervivencia de la humanidad, participando la admiración y una porción de la caza que ayudó a capturar. Si bien tampoco me gusta la caza porque, al menos acá, ya no existe esa necesidad atávica. Hay que reconocer que en otros lugares será la única manera de ingerir proteína y un lujo excepcional. Un abrazo.
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Totalmente de acuerdo Carlos, así es, en estas comunidades esa era la razón en general, sobre todo cuando escaseaba la comida. Un abrazo
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Y besos!!
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Para tí también
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El Chimichurri subió de categoría.
La fotografía de la rama y la luna me ha parecido una preciosidad.
Me encantan tus historias, ya te lo he dicho muchas veces pero, bueno, una más.
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Indudablemente que así fue y se empezó a valorar, subieron sus acciones en la bolsa. Esa fotografía fue desde la ventana del cuarto, una visión muy bella, en las nochecitas del verano. Un abrazo grande
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